La parroquia Belisario Quevedo, en el cantón Latacunga, sigue siendo afectada por el abigeato. En esta ocasión, delincuentes sustrajeron tres toretes de una propiedad ubicada en uno de los barrios de la parroquia, generando preocupación entre los ganaderos y habitantes del sector.
El robo de ganado se ha vuelto recurrente en esta zona rural, donde los moradores denuncian la falta de presencia policial y la lenta respuesta ante emergencias. Según reportes comunitarios, el ECU 911 puede tardar hasta 45 minutos en atender una llamada, tiempo que es aprovechado por los delincuentes para huir sin ser capturados.
En Belisario Quevedo existen 25 barrios, cuyos comités de seguridad se han venido organizando para enfrentar la creciente inseguridad. Hace un mes, se reunieron con autoridades provinciales, incluido el Gobernador y el Intendente, para solicitar la reactivación del UPC de la parroquia, abandonado desde hace aproximadamente cuatro años.
La ciudadanía expresa temor, ya que muchos de los delincuentes actúan armados y con total impunidad. Exigen acciones urgentes y efectivas para proteger sus hogares y sus fuentes de sustento.
