Tras la elevación de la alerta amarilla a naranja hace dos semanas por el fenómeno de El Niño, la Unidad de Gestión de Riesgos del Municipio de Pujilí realizó la intervención comunitaria en las dos parroquias del subtrópico que están en territorio sensible, Pilaló y Tingo La Esperanza.
En primera instancia, se ha capacitado y conformado los comités comunitarios de gestión de riesgos con los habitantes, a fin de prevenir en gran porcentaje los daños por inundaciones y deslizamientos de taludes.
Asimismo, se ha dado apoyo y asistencia técnica a las Juntas Parroquiales para generar políticas públicas en material de gestión de riesgos.
Danny Salazar, relacionador comunitario del GADMIC de Pujilí, mencionó que en seis de los 17 recintos existentes en estas parroquias se ha puesto mayor énfasis en la ejecución de similacros y demás actividades, ya que serían las más afectadas históricamente.
El trabajo se lleva a cabo interinstitucionalmente con la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, El Cuerpo de Bomberos y demás instituciones expertas en asistencia humanitaria, afirmó Salazar.
Redacción: El Emisario